Una de las múltiples aportaciones de internet es que nos permite compartir información y conocimientos, democratizando así el acceso a la cultura. La red, que nos conecta a todos, nos convierte no solo en consumidores de cultura, sino también en creadores.
Gracias a las redes sociales podemos dar a conocer nuestras creaciones sin tener que pasar ningún filtro y podemos, todos, convertirnos en escritores con un público que nos lea, sin necesidad de convencer a un editor para que nos publique.
Teniendo esto en cuenta, vamos a escribir microrrelatos ajustados a los 140 caracteres que caben en un tuit.
Un microrrelato es un texto narrativo caracterizado por la brevedad y la concisión. Esto implica unos personajes apenas esbozados, una trama mínima y una estructura sin planteamiento y en muchas ocasiones también sin desenlace. Lógicamente, la elipsis será un recurso narrativo imprescindible.
El lector tiene una participación activa, pues se convierte casi en coautor, dado lo mucho que tiene que poner de sí para completar el sentido de estas narraciones mínimas. Por eso, los títulos son fundamentales para la interpretación de los microrrelatos, pues ayudan a saber dónde poner el foco.
Cada alumno de forma individual escribirá un microrrelato en 140 caracteres, lo compartirá con la clase y entre todos elegirán por votación un ganador. Estos microrrelatos se colgarán en un espacio virtual (padlet).
De Competencias para el siglo XXI 4 ESO, editorial Santillana.