El Lazarillo se publica por primera vez en 1554 (Burgos, Alcalá de Henares y Amberes). El autor hizo una crítica de la sociedad, especialmente de la nobleza y del clero y también a la ausencia de valores morales y religiosos; la hipocresía social: crueles mendigos, curas faltos de caridad y moral, hidalgos venidos a menos, que prefieren morir a trabajar para defender su limpieza de sangre y su honra.
Vídeo sobre El Lazarillo de Tormes del programa La mitad invisible.
